Durante este puente fueron sustraídos cinco carteles indicadores de árboles, arbustos y plantas del itinerario que se realiza por el soto de la Pinzana, situado en el Parque de los Sotos de Monzón. Estos carteles fueron realizados de forma artesanal por un voluntario, mediante el pirograbado de su nombre común y científico y un dibujo de las hojas o flores de la planta y los habían instalado los voluntarios del Proyecto de Voluntariado en Ríos que desde el mes de Agosto está trabajando en el soto de la Pinzana de Monzón.Este Proyecto se ha desarrollado mediante el trabajo voluntario de más de 50 personas que han estado trabajando para que este itinerario pudiera ser visitado por los escolares de toda la provincia, aprendiendo sobre el ecosistema del Cinca y conociendo sobre el terreno los árboles y arbustos de nuestros sotos.
Desde la inauguración del Centro de Interpretación de la Pinzana en Monzón en Abril de este año, han pasado por el itinerario 1.200 niños y jóvenes de la Comarca del Cinca Medio y de poblaciones como Huesca, Fraga, Benabarre, Esplús, Zaidín o Lalueza.
Los carteles sustraídos hacen mención a las siguientes plantas y arbustos: Tamariz, Uña de Gato, Lechetrezna, Betiquera y Escobizo y se agradecería se devolvieran, o que si alguien los localiza avisara al teléfono 649 438 573, pues fuera de este itinerario no tienen validez (llevan grabada la firma de Pinzana) siendo de gran utilidad para la interpretación del itinerario.
A modo de reflexión Ecologistas en Acción considera que:
Los cinco carteles no sólo son de madera; llevan una parte de ilusión de personas que quieren conservar y reanimar este planeta, las indicaciones de personas que entienden de flora y nos enseñaron qué plantas y dónde están ubicadas en la Pinzana; la ilusión de transmitir información, de vestir el recorrido y de ofrecer un equipamiento agradable y educativo a aquellas personas que quieran visitar la Pinzana. Es una parte del patrimonio público de los de aquí y de los de allá. Llevan la ilusi&oacte;n de los voluntarios grandes y pequeños, que hemos compartido. También nuestro tiempo, esfuerzo físico y emocional. Pero como somos "corredores de fondo", volveremos a construirlos e instalarlos con más ilusión; porque " Más puede una persona que quiere, que un millón que no quieren" y somos unas cuantas personas las que queremos conservar y reanimar este trozo del planeta, llamado SOTO DE LA PINZANA.
Los cinco carteles no sólo son de madera; llevan una parte de ilusión de personas que quieren conservar y reanimar este planeta, las indicaciones de personas que entienden de flora y nos enseñaron qué plantas y dónde están ubicadas en la Pinzana; la ilusión de transmitir información, de vestir el recorrido y de ofrecer un equipamiento agradable y educativo a aquellas personas que quieran visitar la Pinzana. Es una parte del patrimonio público de los de aquí y de los de allá. Llevan la ilusi&oacte;n de los voluntarios grandes y pequeños, que hemos compartido. También nuestro tiempo, esfuerzo físico y emocional. Pero como somos "corredores de fondo", volveremos a construirlos e instalarlos con más ilusión; porque " Más puede una persona que quiere, que un millón que no quieren" y somos unas cuantas personas las que queremos conservar y reanimar este trozo del planeta, llamado SOTO DE LA PINZANA.
